¿Una brecha insalvable?

“Luces, cámara y ¡acción!”. Una mujer y un hombre entran en escena. Mantienen una conversación apasionada que pondrá la piel de gallina a los espectadores, es la última escena de la película. “¡Corten!” El salario de la actriz será un 21% menos que el de su compañero.

Hace unos meses que salió a la luz la noticia de que la protagonista de la conocida serie ‘House of cards’, Robin Wright, dio un ultimátum a los responsables de la misma para que sus honorarios se igualasen a los de su compañero de reparto Kevin Spacey.

Según explicó la actriz, lo hizo tras analizar las estadísticas donde en muchos momentos de la serie, su personaje llegaba a ser más popular que el de su compañero. Además, en la propia producción, se representan de forma igualada al hombre y a la mujer por lo que sería lógico que esa paridad se llevara también detrás de los focos.

Ya son varias las actrices que han alzado su voz denunciando la desigualdad salarial en Hollywood. Recordaréis el reivindicativo discurso de la actriz Patricia Arquette al recoger su Óscar por ‘Boyhood’ donde ponía en evidencia esta situación y exigía que se igualasen los salarios entre hombres y mujeres.

Patricia Arquette_desigualdad

Existe una larga lista de actrices que han puesto en evidencia esta situación: Lena Dunham, Jennifer Lawrence, Jessica Chastain, Charlize Theron, Meryl Streep o Amanda Seyfried, entre otras. Esto ha generado un gran debate, ya que algunos defienden que los actores masculinos tienen un mayor salario porque protagonizan los papeles más importantes y con mayor repercusión; la mayoría de los papeles femeninos son secundarios. Y esto es cierto. Es cierto porque la gran mayoría de guionistas, directores y productores de la industria del cine son hombres, hombres que cuentan en su mayoría historias para hombres relegando a un segundo plano a la mujer y no únicamente en términos de ficción, sino contribuyendo a la invisibilización del sexo femenino en la sociedad.

Patricia Arquette puso en evidencia la desigualdad salarial entre hombres y mujeres en la industria del cine en la gala de los Óscars.

No, estas actrices no sólo están pidiendo que aumente su salario astronómico. Estas actrices están dando voz a un problema global, a una brecha salarial que no sólo existe en la industria del cine sino que convive en todos los ámbitos de la sociedad. Estas actrices visibilizan una gran lacra que, a día de hoy, todavía nos persigue.

La brecha salarial en EEUU alcanza el 23% y en la Unión Europea el 16% por un mismo puesto de trabajo. Esta diferencia refleja la discriminación y las desigualdades en el mercado laboral por razones de género. Mismas obligaciones, mismos derechos, sólo es eso.