Cuando aún los motores eléctricos a baterías no han logrado conquistar el corazón de nuestros vehículos, surge una nueva tecnología que promete transportarnos de una vez por todas al futuro de la movilidad sostenible: la pila de hidrógeno.
La pila de hidrógeno se ha convertido en una auténtica innovación ya que con ella, los coches eléctricos tienen más autonomía sin necesidad de realizar largos periodos de recarga enchufados, sino repostando unos depósitos en unos minutos de manera parecida a como lo hacemos ahora con la gasolina o el diésel.
Ese hidrógeno almacenado se mezcla posteriormente con aire comprimido extraído de la propia calle para generar electricidad que pasa a unas baterías y de ahí al motor.
No es un experimento ni ciencia ficción, sino una propuesta muy seria, tan seria como la firma nipona Toyota o la coreana Hyundai, que se han erigido como pioneras en la comercialización de este tipo de vehículos. Y no, no son una exclusividad oriental, sino productos destinados al mercado internacional. Hablamos del Hyundai ix35 Fuel Cell y del Toyota Mirai, los primeros vehículos con pila de combustible de hidrógeno en venta.
Hyundai ix35 Fuel Cell
Tras bastantes prototipos Hyundai lanzó en 2013 un modelo de serie de su ix35 con pila de combustible que comenzó a entregarse un año más tarde en Estados Unidos y posteriormente en Europa, aunque su avance está siendo lento y a fecha de hoy sus ventas no superan las 300 unidades.
Se trata de un crossover movido por un motor de tracción delantera con 136 CV de potencia que acelera de 0 a 100 km en 12 segundos y medio y que puede llegar a una velocidad de 160 kilómetros por hora. Puede llenarse en entre 3 y 5 minutos con hasta 5,6 kg de hidrógeno, lo que le permite circular alrededor de 420 kilómetros sin repostar. Por todo lo demás se trata de un Hyundai ix35 al uso, salvo por un pequeño recorte del maletero.
Toyota Mirai
El Toyota Mirai, por su parte, ha pasado a monopolizar la escena del vehículo de hidrógeno este mismo año, ya que en su primer mes de vida comercial en su tierra natal pulverizó las expectativas y registró miles de pedidos.
Y es que el Gobierno japonés ya ha abrazado el hidrógeno como el combustible del futuro y ha lanzado un agresivo plan de ayudas para la compra de vehículos y el desarrollo de estaciones de servicio con la meta de que se note su impacto para 2020, año de los Juegos Olímpicos.
Si todo sale según lo previsto, el modelo estaría además disponible para la compra en Reino Unido, Alemania y Dinamarca en septiembre y en California a final de año.
El motor de tracción delantera del Toyota Mirai tiene una potencia equivalente a 155 caballos y acelera de 0 a 100 en 9 segundos y medio, anotándose una velocidad máxima de 178 kilómetros por hora. Sus depósitos de hasta 5 kilos de hidrógeno a alta presión se llenan en unos cinco minutos y proporcionan una autonomía de unos 500 kilómetros.
Por supuesto, los conductores de este tipo de vehículos se encuentran aún con el escollo de no contar con una amplia red para repostar. En España, ésta todavía se encuentra en una fase temprana, pero ya se están dando avances, como las dos estaciones de hidrógeno que Abengoa ha construido en Sevilla.
Además, hay que tener en cuenta que es muy probable que las petroleras apuesten por el negocio de la venta de hidrógeno, pues sólo tendrían que incorporarlo a las gasolineras existentes.